El mole es una delicia mexicana. Es una salsa compleja, preparada con diferentes tipos de chiles, especias, frutas y nueces. Lo puedes encontrar en diferentes colores: negro, rojo o verde. O también, de diferentes regiones: Puebla, Oaxaca, Estado de México y muchas más.
Pero no hay duda de que cualquier color o sabor que escojas te dejará chupándote los dedos. La manera tradicional de servirlo es sobre pavo o pollo, acompañado con arroz, tortillas y frijoles.
La versión que hoy te presento es pollo con mole y cazuelitas de masa. Las cazuelitas, o dumplings, se cocinan directamente en el mole y, al probarlas, se deshacen en la boca: ¡toda una experiencia para el paladar!
Para esta receta, utilicé mole en pasta, que puedes encontrar en algunos mercados mexicanos. Si no la encuentras, puedes usar mole ya preparado (del que no necesitas combinar con caldo de pollo) que por lo general, se vende en frascos.
Y si quieres lanzarte a la aventura, prepara el mole tu misma con esta receta.